La mujer loca

 

 

Que podemos decir de Juan Jose Millás, pocas son las personas que no le conocen y más en Valencia su tierra, periodista, comentarista y escritor nacido en 1946 con un palmares envidiable como Premio Sésamo 1975, Premio Nadal 1990, Premio Primavera de Novela 2002, Premio Planeta en  2007 con la novela El mundo, Premio de Periodismo Cultural Manuel Vázquez Montalban. Su obra narrativa se ha  traducido a veintitrés idiomas.

Con la mujer loca, nos encontramos a Millás o al doble de Millás, en unas reflexiones verdaderas o falsas sobre la falta de imaginación para poder seguir escribiendo, lo que le lleva a Emérita una enferma cuya vida se esta apagando y con la que entablará unas conversaciones de las cuales espera poder escribir un reportaje sobre la eutanasia.

Allí conoce a Julia que tiene una habitación alquilada en casa de Serafín y su mujer Emérita, una joven pescadera que trabaja en una gran superficie y que está enamorada de su jefe Roberto, para  impresionarlo ya que según dice es filólogo la chica por la noche estudia gramática.

Una serie de acontecimientos y la visitas rutinarias hace pensar a Millás la posibilidad de hacer una novela con la vida de Julia, pero antes tiene que superar su bloqueo literario con la ayuda de su psicoterapeuta.

¿Verdadero o es falso?... nos encontramos con una gran novela.

Cartas que siempre esperé

 

María de la Pau Janer nació en Palma de Mallorca, es doctora en Filología y profesora de la Universidad de les Illes Balears, lo que queda muy reflejado en ésta novela que es principalmente donde se desarrolla la misma.

Cartas que siempre esperé,  narra la vida de un joven, Luis obsesionado con el recuerdo de su madre Ricarda, fallecida siendo muy joven y a la que recuerda detrás de la ventana con la mirada melancólica esperado una carta que llega tarde.

Miguel es el joven cartero de un pequeño pueblo con diecisiete años que cada día va con su bicicleta, pintada cada año por su padre,  pedaleando repartiendo el correo y pasando de largo ante la ventana de Ricarda, y con el viaja su secreto.

Luis, una vez huerfano también de su padre, se va a la capital y empieza a trabajar en Correos en el departamento de cartas muertas, donde van aquellas que no encuentra ni al destinatario ni al remitente, donde encuentra unas cartas perdidas de Paula que le llegan a obsesionar.

Jaime Cifre, Martina Mestre, Joaquin, Leonor, Clara y Gerardo el pintor dan vida a ésta narrativa que te hace sentir que los sentimientos y valores nobles hacen posible guardar secretos que una vez resueltos te permiten cerrar una página del pasado y poder vivir intensamente el presente.