jueves, 21 de octubre de 2010

Restaurante Mercatbar - Valencia

Creo que como todos los que conocemos la cocina de Quique Dacosta antes " El Poblet "en Denia, estábamos esperando que abriera éste local en la c/ Joaquín Costa, 27 de Valencia, para poder ir a degustar su espectacular comida.
Hoy día 21 de octubre a las 14:00 horas me he llevado una de las decepciones más grandes en restauración que podía llevarme, aún estoy pensando como es posible que Quique Dacosta sea fundador, creador y socio junto con Alex su hermano y responsable de éste local junto a otros socios que han formado la Daco&Co.
Hemos ido a comer dos personas con expectación e ilusión y nos encontramos con un desorden sin sentido ya que una vez sentados ( no reservan mesas) han tardado más de 20 minutos en servir dos cervezas con papas y cacaos las papas (siete).
Después de reclamar la atención de los camareros y siendo atendidos en primer lugar por Alex, conseguimos la botella de vino ya pasada la media hora volvemos a reclamar y por fin alguien nos toma nota, a la hora aproximadamente de espera nos traen el anunciado menú de cinco entrantes y arroz, compuestos por pan, tomate y ajoceite, seguido de dos navajas con ajo y perejil, una coca finísima, ensaladilla rusa y un graten de centolla a la donostiarra por fin y tras volver a insistir ante la tardanza del arroz nos traen dos minúsculos platos de arroz con setas.
Una vez más volvemos a solicitar que nos den el postre que se nos hace tarde y por fin llega una torta de turrón y sufle de chocolate caliente por ultimo café.
Solicitamos la cuenta y tenemos que reclamar al cabo de 10 minutos las devoluciones a lo que nos preguntan cuanto dinero les habíamos entregado (no tenían ni idea) y nos vamos, hora 16:30.
Alex, nos invita al vino y a los cafés ante la desagradable experiencia vivida. Precio del menú 16,50 euros.
Local moderno con capacidad para unas 100 personas muy ruidoso y además con problemas en la cocina (alguna tubería rota) abundante agua por los suelos que los camareros no podían recoger y tapaban el suelo con manteles blancos, idas y venidas con pozales por medio del comedor llenos de agua y todas las vajillas, vasos, tenedores, platos y sobrantes de los platos acumulados en el mostrador de a los baños y la cocina, un verdadero desastre.
Creo que todo esto no nos ha permitido disfrutar de la calidad de los platos, lamentable.
Quique, espero que soluciones los problemas que son muchos y que se organice al personal pues son muchos camareros pero sin orden ni concierto.
Esperare la apertura el otro restaurante VUELVE CAROLINA, espero tener más suerte.